La destrucción causada por la Guerra Civil (1936-1939) en Rivas Vaciamadrid fue casi total. Conforme al Decreto de 23 de septiembre de 1939, que regulaba la adopción por el Jefe del Estado de localidades dañadas por la guerra, Rivas Vaciamadrid cumple los requerimientos del programa. Las autoridades civiles y religiosas de la localidad solicitan, por tanto, la incorporación del municipio al plan de reconstrucción de zonas devastadas.
En 1943, la solicitud recibe una respuesta positiva. El Decreto de 18 de junio, publicado en el Boletín Oficial del Estado el 14 de julio, dice textualmente:
«De conformidad con lo dispuesto en el Decreto de veintitrés de septiembre de mil novecientos treinta y nueve, a propuesta del Ministro de la Gobernación, y previa deliberación del Consejo de Ministros, DISPONGO: Artículo único.— A los efectos de la reconstrucción, el Jefe del Estado, en nombre de la Nación, adopta la localidad de Ribas y Vaciamadrid [sic] (Madrid), que queda sujeta al régimen establecido en el Decreto de veintitrés de septiembre de mil novecientos treinta y nueve. Así lo dispongo por el presente Decreto, dado en Madrid a dieciocho de junio de mil novecientos cuarenta y tres. FRANCISCO FRANCO. El Ministro de la Gobernación, BLAS PÉREZ GONZÁLEZ».
Los fondos necesarios para sufragar los gastos del proyecto serían facilitados, como también marca el Decreto de 23 de septiembre de 1939, por el Instituto de Crédito para la Reconstrucción Nacional, con el carácter de anticipo para obras a cargo del Estado. Dieciséis años más tarde, en 1959, solo una parte del proyecto se pudo inaugurar.
La foto de Concepción Santero, tomada desde la torre de la iglesia, muestra algunas de las casas entregadas en julio de 1959.
Por encargo del Ayuntamiento de Rivas Vaciamadrid, hemos producido cuarenta y cuatro banderolas que desde el pasado mes de abril cuelgan de las farolas de la calle San Isidro, en el Casco Antiguo. El proyecto, dirigido por Arturo Ledrado, ha contado con el patrocinio del Centro Comercial y de Ocio Parque Rivas.